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La función de los poceros Madrid tiene que ver con la construcción, remodelación, inspección, mantenimiento y reparación de pozos, zanjas, arquetas, sépticos y galerías visitables. Todos estos elementos son parte complementaria de la red de saneamiento y drenaje necesaria para la gestión de los vertidos de las viviendas.
Por su parte, los pozos son una parte esencial de la unidad principal del alcantarillado. Su objetivo es posibilitar las tareas de registro de las acometidas generales, el entronque y el mantenimiento de las redes.
Las obras relacionadas con estos pozos deben ser realizadas por expertos. Recuerda que un trabajo inadecuado puede acarrear graves consecuencias y mayor gasto de dinero.
¿Por qué cada trabajo necesita un pozo de distinto diámetro?
A la hora de solicitar los servicios de poceros Madrid para cualquier labor o reparación en los pozos es necesario elegir con cuidado. Este tipo de trabajo debe ser llevado a cabo por personal cualificado y con amplia experiencia en el sector.
Las unidades de pozo tienen un papel fundamental en la gestión de los vertidos de las edificaciones. Es por eso que requieren estar limpias y bien instaladas para que de esa forma puedan desempeñar su función sin inconvenientes u obstáculos.
La instalación de pozos es obligatoria para cambios de dirección de las conducciones de la red de alcantarillado. También en las uniones de 2 o más colectores, al inicio de los colectores y en los cambios de sección.
Existen distintas clases de pozos dependiendo de su función. Están los de acometida, areneros, de limpieza, para introducción de material y de resalto. Pero también se pueden clasificar de acuerdo al tipo de acometida y a las dimensiones.
Cada trabajo requiere de un pozo de distinto diámetro, debido a que están pensados para una profundidad determinada. Es decir, responden a las características particulares del proyecto. Se entiende que alrededor de 1,5 mm de cota especificada en el plano, se construyen arquetas y pozos de variadas dimensiones internas.
Es importante recurrir a una empresa fiable que sea capaz de diseñar y desarrollar estos trabajos de acuerdo a las necesidades del inmueble.
Pozos de 110 cm de diámetro
Las unidades de pozo de 110 cm de diámetro son empleadas para el registro en la parte central de las calles o vías de las ciudades. Estas serían los puntos de encuentro con las acometidas de aguas de las viviendas y edificaciones privadas.
Pozos de 80 cm de diámetro
Las unidades de pozo de 80 cm de diámetro se usan como registro general de la acometida del alcantarillado de inmuebles privados. Estas están situadas al frente de la fachada o portal de las fincas, deben estar lo más cerca que se pueda de la calle o vía a acometer.
A estos pozos también se les conoce con el nombre de trasdós. Debido a que cuentan con un tubo ubicado por la parte de atrás de la pared. La arqueta o pozo trasdós se emplea para evitar el rápido deterioro de la unidad a causa de un fuerte golpe de los vertidos al caer desde una altura elevada.
Pozos de 70 cm de diámetro
Estos pozos con diámetro de 70 cm son utilizados como registro interno de las fincas o viviendas. Se instalan principalmente para los entronques o uniones entre galerías subterráneas internas que se encuentran a una considerable profundidad.
De manera que para la realización de proyectos de construcción o rehabilitación de los distintos elementos que conforman la red de saneamiento, es importante buscar la ayuda de un equipo de profesionales expertos en este tipo de tarea.
Es la mejor manera de estar actualizado con las normativas y de evitar posibles atascos y otros problemas. Lo ideal es solicitar una inspección de las tuberías cada cierto tiempo y así mantener la calidad de vida de quienes habitan la edificación.
